GAVÀ EN AGOSTO

Gavà está desierta. Ni comercios, ni coches, ni gente por las calles. El sol es el único que no se ha ido de vacaciones. El sol y unos cuantos, que nos debatimos entre mirar las anticuallas que nos echan por la tele (la culpa es de los recortes!!), buscar mensajes nuevos en las redes que nos devuelvan a la normalidad de un mundo en movimiento o dormitar en el sofá con las gotas de sudor saliéndonos por todos los poros. El aire que corre desde la terracita hasta la ventana de la entrada y que de acondicionado no tiene nada, también se ha ido de vacaciones.

Gavá está de vacaciones y yo no puedo pintar. Las papelerías y tiendas de arte tampoco están para los que quedamos en el pueblo, y yo no tengo óleo blanco para terminar mi tela. Es una tela de época oscura (me lo han dicho), por éso quería ponerle un poco más de blanco, para intentar aclarar algo de esta época. Pero me temo que las tiendas se han asustado del tiempo de recortes que vivimos y que a lo mejor no les permite irse en Agosto del año que viene. A mí me parece que es éso por lo que no queda nadie en Gavà. Yo sí, yo y mi tela inacabada y mi pie chungo (Fascitis plantar). Es una época oscura de la que los gavanenses han querido huir, yo no lo he hecho porque no he podido, y me aburro. Pero en realidad, Gavà solitaria es otra Gavà, y tampoco está mal.